Panes elaborados sin gluten, sin lactosa y sin conservantes
beneficios de la miel

Beneficios de la avena sin gluten

La avena sin gluten es aquella variedad cultivada, procesada y almacenada de forma que se minimice la contaminación cruzada con gluten.

Aunque la avena es un cereal naturalmente libre de gluten, a menudo se contamina durante su procesamiento al estar en contacto con otros cereales. Esto puede ser un problema para las personas con enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten, ya que pequeñas cantidades de esta proteína pueden desencadenar síntomas.

En Leon The Baker podrás disfrutar de un Pan de Avena sin Gluten Mil Flores que te aportará todos los beneficios de este cereal saludable, así como las propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y antibióticas de la miel.

pan de avena sin gluten
Pan de Avena sin Gluten Mil Flores

Cómo reconocer la avena sin gluten

Para evitar la posible contaminación de la avena con otros cereales debemos buscar específicamente la etiqueta que indica que el producto está libre de gluten.

La avena no certificada “sin gluten” se cultiva en la misma tierra que otros granos prohibidos para celíacos, como el trigo, la cebada o el centeno, dándose la llamada “contaminación cruzada”.

Además, se suele manipular en las mismas instalaciones que los productos con gluten, por lo que es muy probable que la avena no certificada se haya contaminado durante el proceso de envasado.

La única forma de garantizar su consumo para celíacos es que sea cultivada en campos libres de cereales con gluten, así como transportada y procesada de forma segura. Esta garantía la ofrece la certificación en el envase.

El etiquetado de la avena sin gluten en Europa asegura que su nivel de contaminación es inferior a 20 ppm.

Propiedades

Diversos estudios han demostrado que la avena puede tener numerosos beneficios para la salud, entre ellos, ayudar a reducir los niveles de azúcar en sangre o el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.

Composición nutricional

La avena se clasifica como un cereal de grano entero. Esto significa que conserva las tres partes de las que se componen los granos: germen, endospermo y salvado.

Este cereal tiene un valor energético de 361 kcal por 100 g. Es fuente de proteínas y posee un alto contenido en fibra.

En comparación a otros cereales, presenta un contenido en hidratos inferior y un aporte de lípidos superior, aportando ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, es decir, grasa saludable.

En cuanto a los micronutrientes, la avena posee un alto contenido en hierro, magnesio, zinc, fósforo, tiamina (vitamina B1), vitamina B6 y folatos, además de ser fuente de potasio y vitamina E.

La avena sin gluten también destaca por su contenido en ácidos fenólicos, flavonoides y fitoesteroles. Asimismo, contiene dos tipos de fitoquímicos únicos en este alimento: las avenantramidas y las saponinas esteroidales.

Fuente de fibra

Este cereal destaca especialmente por su contenido en fibra. Entre los efectos fisiológicos positivos de la fibra podemos citar su contribución a la disminución del nivel de glucosa en sangre tras las comidas, o la reducción del colesterol.

Asimismo, la fibra es muy beneficiosa para la salud intestinal y ayuda a tener una mayor saciedad y sensación de plenitud.

La Food and Drugs Administration (FDA) en Estados Unidos declaró ya en 1977 que una ingesta diaria de 3 g de beta glucanos (polisacáridos componentes de la fibra dietética) de la avena puede disminuir el colesterol sérico total así como el colesterol LDL.

Además, podría tener un efecto anticancerígeno al reducir los compuestos que son agentes causantes de cáncer de colon, reducir los niveles séricos de colesterol y la presión arterial (Rasane, Jha, Sabikhi et al. 2015).

Propiedades antiinflamatorias y antioxidantes

La avena sin gluten también cuenta con algunos micronutrientes y compuestos que benefician distintos procesos metabólicos esenciales para el organismo.

La vitamina E es uno de estos compuestos, un antioxidante conocido por proteger al cuerpo de los efectos de los radicales libres y jugar un papel importante en la prevención de enfermedades como cáncer, artritis, aterosclerosis, cataratas, entre otros (Varma, Bhankharia, Bhatia et al. 2016).

Por otro lado, las avenantramidas (AVAs), compuestos exclusivos de la avena, son un grupo único de antioxidantes. Se ha comprobado que tienen una actividad antioxidante de 10 a 30 veces mayor que la de otros compuestos fenólicos.

Además, tienen propiedades anti inflamatorias y antiaterogénicas. De igual forma, ayudan a controlar la presión arterial al producir óxido nítrico, el cual actúa como vasodilatador (Varma et al. 2016).

Beneficios del consumo de avena sin gluten para la salud

Además de ser un alimento beneficioso nutricionalmente, la avena también podría ser útil en la prevención de enfermedades y la disminución de factores de riesgo de afecciones crónicas.

Estas son algunas de las patologías en las que la avena sin gluten puede ser de utilidad por sus mecanismos de acción (Fundación Española de Nutrición).

Diabetes

La avena es rica en beta glucanos, que podrían ayudar a controlar los niveles de azúcar en sangre. Un consumo adecuado de este cereal en personas con diabetes podría ayudar a disminuir la glucosa postprandial, mejorando la resistencia a la insulina (Butt, Tahir-Nadeem, Khan et al., 2008).

Los beneficios de la avena han sido reconocidos desde 1996 por la Asociación Americana de Diabetes (ADA). Según la ADA, su consumo ayuda a controlar la glucosa y moderar los picos de insulina que pudieran causar problemas metabólicos en personas diabéticas.

Obesidad y síndrome metabólico

Las personas con sobrepeso y obesidad que padecen síndrome metabólico también pueden verse beneficiadas por el consumo de avena sin gluten gracias a su efecto en la tolerancia a la glucosa y en la sensibilidad a la insulina.

Numerosos estudios han encontrado que el consumo habitual de cereales de grano entero, como la avena, se relaciona de forma inversa con el IMC.

Además, su consumo habitual también se asocia a una menor ganancia de peso con los años.

Asimismo, la avena puede reducir la sensación de hambre. El incremento en la producción de ácidos grasos de cadena corta (AGCC), gracias al incremento de la fibra dietética, se asociaría a concentraciones más elevadas en la fase post prandial de hormonas supresoras de apetito (Liu, Willett, Manson et al. 2003).

Enfermedades cardiovasculares

El consumo de avena sin gluten también se relaciona con la reducción del colesterol, lo que podría jugar un papel fundamental en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

La avena puede ayudar a disminuir los niveles de la lipoproteína de baja densidad (LDL) “colesterol malo” y a aumentar ligeramente los niveles de lipoproteína de alta densidad (HDL) “colesterol bueno” (Prasad, Alok, Latha et al. 2013).