Panes elaborados sin gluten, sin lactosa y sin conservantes
El teff es un cultivo de grano tropical que pertenece a la familia de las gramíneas, Poaceae. Se cultiva principalmente en Etiopía y Eritrea, donde se cree que se originó hace miles de años.
Puede crecer en una variedad de condiciones ambientales y de ahí que el grano venga en variedades más oscuras y más claras, siendo las más populares el marrón y el marfil.
El teff tiene un sabor terroso a nuez. Las variedades más ligeras tienden a ser ligeramente dulces también.
Su popularidad ha crecido en el resto del mundo debido a que no contiene gluten.
Debido a que es tan pequeño, el teff generalmente se prepara y se come como un grano entero en lugar de dividirse en germen, salvado y grano, como es el caso con el procesamiento del trigo.
Al ser un grano muy pequeño, generalmente se prepara y se toma como un grano entero, pero también se puede moler y utilizar como harina integral sin gluten.
El teff es muy nutritivo. Solo 100 gramos de harina de teff proporcionan:
Calorías: 366
Proteína: 12,2 gramos
Grasa: 3,7 gramos
Carbohidratos: 70,7 gramos
Fibra: 12,2 gramos
Hierro: 37% del valor diario (DV)
Calcio: 11% del DV
En comparación con otros granos, el teff es una buena fuente de cobre, magnesio, potasio, fósforo, manganeso, zinc y selenio.
Además, es una excelente fuente de proteínas, que cuenta con todos los aminoácidos esenciales.
Es particularmente rico en lisina, un aminoácido que a menudo falta en otros granos y que es esencial para la producción de hormonas, colágeno, proteínas, enzimas, y elastina. Además la lisina ayuda a la absorción de calcio, la producción de energía y la función inmunológica.
Sin embargo, algunos de los nutrientes de la harina de teff pueden absorberse mal, ya que están ligados a antinutrientes como el ácido fítico. La forma de reducir los efectos de estos compuestos es a través de la lacto-fermentación, que no es más que la fermentación de la harina de teff mezclándola con agua y dejándola a temperatura ambiente unos días, de manera que la levaduras naturales y las bacterias del ácido láctico descompongan los azúcares y parte del ácido fítico. Esto se produce en el proceso de elaboración de un pan con las levaduras naturales.
En Leon The Baker la Hogaza de teff con semillas de amapolas es uno de nuestros productos que se ha hecho cada vez más popular a medida que el consumo de teff se ha empezado a extender.
La harina de teff tiene varias ventajas que pueden convertirla en una excelente alimento en su dieta.
Es libre de gluten
Como la harina de teff naturalmente no contiene gluten, es una alternativa perfecta sin gluten a la harina de trigo.
Posee un alto contenido en fibra
La harina de teff contiene hasta 12,2 gramos de fibra por 100 gramos, más que muchos otros granos.
Por lo general, se recomienda a las mujeres y los hombres que coman 25 y 38 gr de fibra por día, respectivamente.
Una dieta alta en fibra se asocia con un menor riesgo de accidente cerebrovascular, enfermedad cardíaca, alta presión arterial, diabetes, enfermedad intestinal y estreñimiento.
Es rico en hierro
El teff es un alimento con contenido muy alto en hierro, mineral esencial para transportar el oxígeno por todo el cuerpo a través de los glóbulos rojos.
De hecho, la ingesta de este grano está relacionada con la disminución de las tasas de anemia en mujeres embarazadas y puede ayudar a ciertas personas a evitar la deficiencia de hierro.
Después de todos estos beneficios del teff os recomendamos que lo probéis si no lo habéis hecho ya. Os dejamos un par de recetas para disfrutar del pan de teff:
Ingredientes:
Elaboración:
Pide a tu carnicero de confianza que haga unos escalopines de ternera de la parte de la tapa o alguna pieza que sea jugosa para la plancha.
Haz rebanadas con la hogaza teff y coge dos del centro del pan para que sean las más grandes.
Lamina la cebolla en juliana y pon en una sartén a fuego muy bajo, con un poco de sal para que sude.
Muévelo de vez en cuando para que no se queme. Déjalo que se caramelice y se haga muy despacio.
Mezcla a partes iguales la mostaza y la miel.
Corta lonchas finas con el queso y dejar atemperar.
Tosta el pan y en una sartén o en una plancha que esté bien caliente pasa los dos filetes vuelta y vuelta con un poco de sal.
Monta el sándwich con todos los ingredientes calientes y por este orden, primero en una rebanada de pan untamos la salsa de mostaza y miel, seguido ponemos los dos escalopines de ternera, la cebolla caramelizada bien repartida y las lonchas de queso, terminamos colocando la otra.
Para la Vinagreta de la ensalada
Elaboración:
Para cocinar la calabaza, recomendamos cocinarla al vapor durante 10 minutos o hasta que esté tierna.
Tenemos que estar atentos a que no se quede demasiado blanda porque si no se irá haciendo pure. Una vez cocinada, apartamos y dejamos enfriar.
Ponemos el trigo sarraceno y 2 tazas de agua caliente en una cacerola mediana y hervimos a fuego fuerte.
Cuando rompa a hervir, lo dejamos durante 5 minutos y retiramos del fuego , tapamos la cacerola y dejamos reposar durante 10 minutos, hasta que el agua se absorba y los granos estén suaves pero masticables.
Quitamos el exceso de agua y dejamos enfriar.
Ahora vamos con nuestra vinagreta de aderezo.
Mezclamos el jugo del limón exprimido , el vinagre y el ajo en un mortero o tazón pequeño. Mezclamos bien y se añade sal y pimienta al gusto.
En un plato grande, combinamos la calabaza, el trigo sarraceno, las cebollas, los tomates y el cilantro o el perejil. Añadimos nuestro aderezo y mezclamos bien.
En otro tazón, mezclamos la rúcula y las espinacas con el jugo de naranja. Coloque las verduras en ensaladeras individuales y cubra con la mezcla de granos.
Por ultimo cortamos nuestros panecillos de remolacha en dados pequeños y los pasamos por la sartén por unos 5 minutos a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva, vamos moviendo para que no se quemen.
Adornamos con los dados de pan teff y semillas de calabaza.
Servir fría o a temperatura ambiente.
¡Que lo disfrutéis!
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